Un lugar mágico, único en Europa: el Centro Internacional del Títere de Tolosa
Las tierras guipuzcoanas son un sitio increíble para visitar, con muchos pueblos preciosos y una ciudad como San Sebastián que ofrece fantásticas posibilidades culturales, turísticas y gastronómicas. Pero en este caso el protagonista de nuestro post no es la ciudad donostiarra. El protagonista de nuestro post es un lugar único en toda Europa.
En el valle del río Oria a menos de 30 kms de San Sebastián hay un pueblo muy bonito llamado Tolosa, que todos conoceréis, famoso por sus alubias. La riqueza gastronómica del pueblo es para empezar y no parar, con unos chuletones que quitan el sentido y una tradición pastelera con unos dulces y chocolates para volverse locos. Aunque a nosotros lo que más nos encandiló fue la visita que hicimos al ‘TOPIC‘, el Centro Internacional del Títere de Tolosa.
Punto de encuentro para los titiriteros de todo el mundo, esta casa de los títeres despierta desde que entras la sensación de estar en un lugar mágico, misterioso y muy emocionante. Hay decenas de muñecos y marionetas originarias de todas las partes del mundo, que encienden la imaginación de pequeños y mayores conforme avanzas en el recorrido por cada uno de los decorados de la casa.
Así, nos cuentan en su página web que: ‘Entrar en este edificio debe ser especial. Vamos a un mundo de objetos animados, de poesía, de historias de ficción, de juego, de humor, de emociones, y de teatro, pero también un mundo material, un mundo de arte y artesanía. Un universo de imaginación.
Este lugar no es como los museos que habitualmente visitamos. Es la Casa de los Títeres. Es como un gran almacén, lleno de cámaras secretas y mágicas, de límites a veces infinitos, de muñecos y decorados, de recuerdos y proyectos. Es un plató, es un escenario, es un laboratorio. No es un escaparate’.
Es un sitio fascinante, bastante desconocido a pesar de lo interesante que es. Si tenéis la oportunidad de visitarlo no la desaprovechéis, y luego nos contáis la experiencia. Nosotros nos hicimos un montón de fotos y cuando terminamos la visita nos pasamos por la tienda del museo para comprar alguna marioneta. Luego ya seguimos con los pintxos y los vinos hasta colapsar. ¿Es lo suyo no? 😛
Esperamos que os haya gustado la entrada. ¡Muchos besos a tod@s!