Pon un columpio en tu vida y ¡a volar como los pajarillos!
Todos hemos soñado alguna vez con volar como los pajarillos en el campo. Pero como no tenemos alas, nos hemos puesto a pensar alguna solución alternativa. Los columpios tienen un significado simbólico asociado a la libertad y como no, a la infancia. Et voilà ¡nos permiten volar sin alas! Además pueden ser un elemento decorativo perfecto para darle un toque original a cualquier rincón de la casa. Ya mismito estamos colocando uno aquí en los talleres de Yosíquesé para dejar volar nuestra imaginación aún más. A ver qué os parecen las propuestas que os contamos a continuación.
Empezamos como no podía ser de otra forma por los reyes de la casa. Cómo nos hubiera gustado a nosotros tener un columpio de pequeños en nuestra habitación, en el salón o incluso en el pasillo, cualquier sitio vale. Eso sí, en estos casos hay que tener cuidadín con el techo, que a más de uno seguro que se le ocurre atravesarlo y acabar en el piso de arriba con los vecinos del quinto.
Para peques y no tan peques, el columpio nos puede regalar unos instantes de relax si volamos bajito y tranquilamente para evadirnos y desconectar del mundo un ratillo. Y si además le ponemos banda sonora a estos momentos, mejor que mejor.
También puedes usar el columpio como decoración si tu intención no es balancearte. Como mesita de noche, aparador, mesa de escritorio… con una cuerda y tablas de madera sólo tienes que inspirarte un poco y el resultado será óptimo. Además así le aportas ese toque tan personal y único a tu casa. Qué más se puede pedir: resultón, baratito y nada convencional.
Si eres de los que tiene más espacio en casa o incluso la suerte de tener un jardín, no te lo pienses mucho. Las hamacas colgantes son una opción fantástica para relajarnos de verdad. Leer un libro, ver la tele o echarse una siestecita mientras te balanceas suavemente no tiene precio. Y no tiene por qué costarnos un riñón. Y sino mira estos ejemplos que traemos.
Y la cosa no queda ahí. Convence a tu jefe para que ponga uno de estos en la oficina, y en el descansito de media mañana podrás relajarte muy a gusto, e incluso te puedes llevar tu ordenador si necesitas cambiar el chip un poco.
O en la sala de reuniones… ¿Te imaginas una reunión aquí? Seguro que serán súper productivas, aunque habrá un pequeño problema: lo mismo se alargan un poco 🙂
No te lo pienses más, coloca un columpio en tu vida. ¡Que tengáis un día fantástico!